En la entrada anterior hablábamos de cómo prevenir los fallos de seguridad si nuestro teléfono móvil se veía comprometido. Muchos de nosotros utilizamos nuestro smartphone para todo, y más aún si lo necesitamos por trabajo.
Y es que puede ser que seamos los más precavidos del mundo y que nunca perdamos nuestro teléfono, o que prestemos atención por si alguien nos echa mano al bolsillo. Sin embargo, los accidentes ocurren así como los descuidos ¿Qué podemos hacer si perdemos o nos roban nuestro terminal?
Hemos perdido nuestro móvil, cómo afecta a nuestra movilidad
Existen 5 pautas importantes a seguir en cuanto descubramos la desaparición. Todas ellas se podrían evitar de haber utilizado una seguridad previa, pero nosotros somos de los que se curan en salud y prefieren hacerlo de igual forma
- Avisa a tu compañía: Para bloquear la línea. Esto evita llamadas indeseadas y los problemas de facturación que puedan devenir
- Cambia todas las claves del dispositivo, hasta las más nimias. Existen muchos servicios en la nube que pueden complicarnos mucho
- Denúncialo. Tanto si ha sido un robo como un descuido. Esto es necesario para bloquear el imei del dispositivo.
- Intenta localizarlo: Útil si ha sido un descuido.
- Ponte en contacto con tu empresa si el terminal les pertenece. Ellos tienen siempre un seguro para este tipo de cosas. No tengas miedo, una acción a tiempo es mucho mejor que una serie de malas decisiones.
Una vez que tengamos nuestro nuevo dispositivo lo mejor es restablecer las copias de seguridad. Y durante los momentos siguientes a la pérdida lo mejor es monitorizar nuestras cuentas para saber si aún nos falta algo por arreglar.
¿Qué protocolos seguiríais vosotros para vuestra seguridad?