AltoNivelMexico publicaba recientemente un artículo sobre la importancia de la movilidad en las empresas, más allá de ser algo puntual, la movilidad ha llegado a las empresas para quedarse.

Mobile Workspaces, la movilidad llega para quedarse

“Es una evolución constante de las formas de trabajo, antes la movilidad se creía exclusiva para la dinámica comercial. Hoy, nuestras nuevas generaciones viven de manera móvil, los jóvenes trabajadores cuentan con dos o tres dispositivos, ellos están preparados para este nuevo concepto de trabajo y las empresas también deberían estarlo”, comenta Juan Pablo Jiménez, vicepresidente de Citrix para América Latina.

Sincronización, la base de todo

Cuando trabajamos todos juntos en un mismo espacio físico, nos encontramos con menos problemas. Todo el mundo tiene acceso a la misma información.

No ocurre lo mismo cuando entra en juego la movilidad, la verdadera movilidad empresarial. Tener un dispositivo móvil está bien y hoy en día es necesario en muchos casos. Pero hablamos de trabajar fuera de la oficina o central de trabajo, es entonces cuando debemos empezar a pensar en sincronizar el trabajo de todo el equipo, esté o no físicamente unido.

Empleados que trabajan fuera de la oficina

Para ellos sí es vital la movilidad, y dan uso a sus dispositivos móviles más allá de las llamadas telefónicas. Sus dispositivos deben estar sincronizados con esa oficina o central, de forma que la información que generan fuera llegué de forma simultánea a la oficina, y se pueda trabajar con ella.

Esta sincronización supone una ventaja competitiva sobre el resto de empresa, sin la cual no tendrán cabida las empresas en un futuro no muy lejano.

Productividad, objetivos y contacto físico

Estos son los tres retos de la movilidad entendida como viene, la tendencia que optimiza y mejora la vida de las personas y de las empresas.

  • Una movilidad empresarial bien entendida, ayudará a mejorar la productividad de los empleados, entendiendo esta como una necesidad recurrente y no un hito puntual.
  • Objetivos. Esta forma de trabajo requiere una mayor autoexigencia por parte de todos los implicados, ello supone la fijación de objetivos a conseguir.
  • Por último, el contacto físico o virtual es fundamental. Trabajar dentro o fuera de la oficina/central no implica ser un alma solitaria y no verse con el equipo. Deben establecerse formas de contacto definidas y con sentido.